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Los agricultores exigen a la empresa que les arregle ese camino vital para poder sacar su mercancía, en plena campaña del pepino
En plena campaña del pepino, con el calor acelerando la producción y las cajas amontonándose, más de un centenar de agricultores de la Costa han visto su vía de acceso a las fincas cortada por las obras de la autovía A-7.
El centenar de agricultores que tiene invernaderos en la zona conocida como El Espinar (término municipal de Lújar) se encontró este martes el camino que da acceso a sus fincas destrozado. El hormigón del firme quebrado, como si hubiesen sacudido la carretera un terremoto. «Ni nos avisaron y nos encontramos sin paso a los invernaderos», cuentan.
Según indican, ya se ha habilitado un camino alternativo por el barranco, que tiene peligro en los días de lluvia por lo que, muy pronto, se mejorarán otras vías para poder pasar por ellas. El problema es que el terreno es empinado y el camino más seguro y directo es el que han cortado las obras de la autovía.
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